1. Introducción

Una Blockchain puede describirse de muchas maneras; como una red, un libro de contabilidad o un ecosistema. Lo cierto es que en su contexto, coexisten diferentes actores que dependen unos de otros, consumen energía y generan y reciben incentivos. Es un delicado equilibrio en el que se busca el beneficio propio, pero donde todos los involucrados desempeñan su papel para mantener un organismo casi vivo.

Cada Blockchain tiene un diseño adaptado a diferentes casos de uso, en los cuales funciona de manera óptima. Por lo tanto, las reglas del juego no son siempre las mismas. Esto nos brinda la oportunidad de explorar y seleccionar el ecosistema del que queremos formar parte en diferentes escenarios.

Profundicemos más en cómo funcionan algunos de estos ecosistemas, cómo interactuamos con ellos y quién o qué los habita.

2. Sistemas distribuidos

El software de una Blockchain no se ejecuta de manera aislada; es un conjunto de diferentes instancias de sí mismo que representan una única verdad. Esto significa que cada nodo participante en la red puede encontrarse a miles de kilómetros de distancia de otro, pero, como es común en los sistemas distribuidos, se comunican de manera asíncrona para mantener un registro común de transacciones.

Al igual que en los sistemas distribuidos, en las Blockchains encontramos soluciones que se valen de conceptos como la inmutabilidad, la asincronía, el consenso y mecanismos para mitigar la baja confiabilidad de las redes. Hablaremos sobre ellos más adelante.

En resumen, cada nodo se puede entender como una computadora independiente que guarda una copia de la Blockchain y se actualiza en tiempo real al recibir y propagar información entre los nodos.

Esta cualidad propicia la descentralización, es decir, no hay una única entidad que controla la red y aquellos que operan nodos tienen una serie de incentivos para hacerlo de manera honesta.

2.1 Incentivos

Los entendemos como elementos que buscan influir en el comportamiento de los participantes de un sistema al definir el costo de las decisiones que toman. Los incentivos pueden ser positivos o negativos. En una red como esta, generalmente no hay forma de eludirlos, y la única opción es optar por acciones que resulten en el mejor equilibrio costo-beneficio para el participante.

Uno de los casos más importantes en una Blockchain son los incentivos económicos que reciben los operadores de nodos, como lo mencionaba antes, un nodo se puede entender como una computadora que ejecuta software 24/7 para poder participar en el ecosistema. Los nodos crean nuevos bloques (de ahí el nombre "cadena de bloques") y distribuyen la información de lo que sucede en la red, esto no es tarea simple y tiene un costo monetario. El incentivo supone recompensas económicas, generalmente pagadas en el token principal de la red.

2.2 Inmutabilidad

La inmutabilidad es una característica fundamental que va de la mano con los incentivos. Lo que sucede en un bloque se convierte en una verdad absoluta y se vuelve parte de la red. Cada bloque que se crea está vinculado al anterior de tal manera que, al auditar la red, si un bloque contiene información modificada, será considerado inválido. Esto hace que la red sea inmutable. En muchos casos, la única forma de "engañar" a este mecanismo sería si el 51% de los nodos presentaran la misma información modificada, lo cual es sumamente difícil de coordinar, ya que normalmente la ubicación y la identidad de los operadores de nodos no son públicas. También podría darse el caso de que una sola entidad controle el 51% de los nodos, por lo que, cuanto más grande sea una red, más segura será (de ahí que Bitcoin haya llegado a consumir más energía eléctrica que países enteros).

3. Confianza

Más bien, la falta de confianza es fundamental en el diseño de una Blockchain. Cuando no existen entidades centrales que moderen las interacciones entre los actores, y cuando muchas de las transacciones que ocurren en la red son entre participantes anónimos, se requiere un ecosistema en el que no sea necesaria la confianza entre ellos.

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Lo que ocurre dentro de una Blockchain está determinado por una serie de reglas programables que garantizan su correcta ejecución bajo una serie de condiciones comprobables.

4. Tokens

Los tokens son un tema muy amplio que requiere un análisis más detallado del diseño y funcionamiento de sistemas complejos que involucran incentivos. Existen varios tipos de tokens que cubren una amplia gama de casos de uso. Por ahora, pensemos en los tokens como una especie de dinero programable que existe solo en el contexto de una Blockchain y puede ser creado, destruido y transferido entre diferentes participantes a través de direcciones (addresses). Se pueden utilizar para representar valor monetario, activos digitales o incluso activos físicos.

4.1 Addresses

Los tokens se emiten dentro del contexto de una red, donde existen y se pueden transferir entre addresses. Estas direcciones son identificadores únicos que pertenecen a algún participante de la red. Están diseñadas como una especie de "firma", de modo que el propietario pueda demostrar que le pertenecen sin necesidad de proporcionar más información al respecto.

A través de una address, es posible interactuar con los tokens. Pueden ser almacenados y transferidos, es decir, es posible enviarlos, recibirlos e incluso crearlos o destruirlos. Estas transacciones pueden estar limitadas por reglas programables. En términos sencillos, en un escenario donde Mariana 👱🏼‍♀️ desee intercambiar tokens de una dirección a otra con Esteban 🧔🏽‍♂️ (un desconocido para ella), se podría realizar la operación sin necesidad de un intermediario, siempre y cuando ambos reciban las cantidades acordadas.

Entonces ¿Qué encontramos dentro de una Blockchain?

Con las características mencionadas anteriormente, mientras se ejecutan transacciones, el número de bloques aumenta. Cada bloque contiene un registro de lo que ocurre a lo largo del tiempo y es imposible de modificar sin ser detectado.

Estos registros pueden consultarse en cualquier momento, lo que brinda transparencia a los participantes. Cada transacción puede representar un amplio espectro de cosas, como la compra-venta de un inmueble, la transferencia de una obra de arte digital, el pago de un servicio, etc.

Dentro de la Blockchain viven registros de lo que sucede en un ecosistema que no requiere confianza ni actores terciarios. Los participantes son capaces de tomar decisiones sobre sus activos, verificar la veracidad de sus interacciones y no necesitan preocuparse por una entidad central que tenga control sobre la red.

Conclusión

En resumen, dentro de una Blockchain se encuentran miles o millones de registros públicos e irrefutables de eventos pasados. Los usuarios tienen la capacidad de crear y consultar estos registros, lo que permite que diversas industrias e instituciones comiencen a aprovechar sus beneficios para diferentes casos de uso.

Como organismos autosustentables que se alimentan de los diversos tipos de participantes que atraen, es fundamental participar en sus ecosistemas para comprenderlos. Con productos como los que estamos desarrollando en Kondor Finance, buscamos aprovechar estas cualidades y fusionarlas con las características de los mundos financieros tradicionales para crear una nueva generación de soluciones que nos permitan explorar en detalle lo que habita dentro de las Blockchains.